Los organismos públicos, en primer lugar, tienen que asegurar el cumplimiento de su misión y, para ello, deben lograr la implementación de un conjunto de políticas públicas.
Para lograr éxito en esto, a la vez que alcanzar un estadio superior de eficiencia en la gestión, se propone implementar un modelo de planificación, reemplazando los esquemas de corto plazo y la improvisación que surge de la ausencia de planes.
La propuesta surge de la experiencia del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social en el período 2008-2014, durante el cual se implementó un Modelo Integral de Planificación que contempla los tres niveles de gestión: estratégico, táctico y operativo.
La novedad de la solución implementada es el uso efectivo de un modelo de producción, a través del cual el organismo ofrece productos (bienes y servicios) a la ciudadanía para satisfacer sus necesidades, las que se identifican en la formulación de políticas públicas. Este modelo reemplaza al proceso de presupuestación inercial tradicional, como función principal de planificación pública.
El modelo opera sustentado por un sistema informático desarrollado ad hoc, cuya característica sobresaliente es que integra y elabora el presupuesto, el POA y el PAC ( Plan Anual de Compras) en forma automática.
Adicionalmente dispone en la base de datos de toda la información para gestionar una contabilidad de costo de la producción, dicho en otros términos, del costo total de la gestión por área.
El modelo descrito se basa en la gestión por procesos y la gestión orientada a resultados, de forma tal que mejora sustancialmente la rendición de cuentas y la transparencia.